En su nuevo libro declara que no es célibe, que lleva catorce años de matrimonio con otro hombre y que ha oficiado matrimonios de muchas parejas homosexuales. También ha venido operando un programa, desde 1992, en favor de los sacerdotes homosexuales que se encuentran "en la anonimidad".
Lynch ha sido sacerdote por cuarenta años, y se mudó a Londres luego de haber vivido en Nueva York, luego que la Corte le autorizó el viaje debido a que su caso de pedofilia fué aclarado porque el demandante era un mentiroso patológico. El cree que la acusación fué manejada por el finado Cardenal O'Connor de Nueva York y un grupo de católicos de ultra-derecha porque Lynche se encontraba en ésos momentos apoyando a la gente enferma de SIDA, lo que le dió mucho reconocimiento.
En su libro "Si no fuera Amor: Sexo, Muerte y Dios", el declara que está casado con Billy Desmond hace 14 años, los casó un monje americano. También declara que la mitad de los sacerdotes católicos son homosexuales y echa la culpa a la iglesia por el escándalo relacionado con pedofilia y la ley del celibato.
"Creo en Cristo, y creo en el Evangelio de justicia", dijo a un programa de radio Sirius XM, "hay una injusticia grosera en mi iglesia, por lo que siento un deber el expresar mi punto de vista, como Cristo lo hubiera hecho. Creo que el Evangelio es derechos civiles y humanos para todas las personas".
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