Relata que se encontraba escribiendo en un Starbucks cuando inmediatamente sintió la presencia de otro homosexual en el area, levanta la cabeza y ve a un muchacho de 16 años, muy atractivo, con camisa estampada y pantalones ajustados, remangados en la basta. Venía acompañado de alguien que parecía ser su padre, que era hombre-hombre; la única manera en que se le podría describir. Enorme é intimidante en estatura, con una camisa de camuflaje, de ésas que usan los soldados, y pantalones jeans sucios.
Casi inmediatamente
después, otro muchacho entró en la tienda, aparentemente de la misma edad que
el primero. Se acercó al muchacho y le dió un abrazo sentido, amoroso. El padre
asintió con su cabeza en una indicación aprobatoria a su hijo. Los muchachos
fueron a pedir sus lattes, el padre pagó la factura y salió.
A pesar de la apariencia
intimidatoria, y de macho, ése padre quiere ver a su hijo feliz.
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