domingo, enero 30, 2011

Odisea


La nieve empezó a caer con fuerza. Los copos parecían de algodón, macroscópicos. Faltando una hora para terminar mi trabajo, por seguridad, y porque usualmente tomo 1 hora en llegar a casa durante la hora punta, cuando en realidad lo hago en treinta minutos sin tráfico; decido salir a las 4:3o PM.
Veo que la ruta 50 se encuentra completamente congestionada y la nieve rápidamente va acumulando sobre las pistas. Decido tomar la ruta 7. Tiene dos millas de recorrido con 25 millas por hora como límite, lo que la hace menos transcurrida. Cuando llego a ella encuentro que el tráfico es menor y lento. No me molesta el tráfico lento. Me hé preparado mentalmente para llegar tarde. La cita que tenía a las 7 de la noche la cancelo, Ineko me dice que me había enviado un email donde ella había cancelado la cita también, me pide que maneje con cuidado y nos despedimos. Veo los carros delante mio a dos cuadras de distancia, detrás mio, a una cuadra viene un grupo de autos, me siento el lider del grupo, la nieve sigue cayendo y sigo las huellas que los carros de adelante han dejado. Prefiero pisar las huellas barrosas que resbalar en nieve fresca. Aunque mi camioneta es all times 4, prefiero ser precavido. Pronto alcanzo los carros delante mio y no es difícil darme cuenta que no se mueven. Los que me siguen se van acumulando detrás. Fué fácil darme cuenta que iba a estar estacionado por mucho tiempo, sin moverme.
Para hacer ésta parte de la historia corta, recorrer el tramo que me llevaría a la vía de circunvalación consumió medio tanque de gasolina. Entré a una gasolinera a llenar el tanque nuevamente. A lo largo del camino vi demasiados carros abandonados por quedarse sin gasolina, ó puestos al costado por accidentes. Un metrobus había dejado a sus pasajeros a la intemperie de la nieve cuando se malogró. Entrar al highway fué fácil, menos tráfico en el sentido en que iba. En el otro sentido varios trailers habían colisionado cuando su carreta de carga resbaló y los jaló en la subida. Los otros trailers, estacionados en la verma para no arriesgar. El resto del tráfico parado en cuatro columnas interminables que seguían, seguían y seguían hasta que tomé mi salida.
Llegué a casa cuando ya había terminado de nevar, la 1:30 AM. Me esperaba limpiar el parqueo que había acumulado poco mas de 6 pulgadas. Dormí cerca de las 3 AM
Esta semana tendrá temperaturas mas frias y tendremos otra tormenta.

2 comentarios:

manu dijo...

Nada mejor para afrontar el frioooo que una buena compañía... Esa sí sería toda una odisea. ¿Qué tal con el chico de la foto?

Besos.

Peter Camenzid dijo...

Con el chico de la foto? Como para derretir la nieve!