Michelangelo di Lodovico Buonarotti Simoni, uno de los mas grandes artistas de la historia tanto por sus esculturas, como por su pintura y obra arquitectónica, fué homosexual.
Triunfó en todas las artes en las que trabajó, caracterizándose por su perfeccionismo. Aunque la escultura fué su predilecta, toma la pintura casi como una imposición del Papa Julio II, y concreta una obra excepcional en la bóveda de la Capilla Sixtina. Ya en edad mayor realiza proyectos arquitectónicos.
Mantuvo relaciones con diversos jóvenes, entre los que se nombra a Cecchino dei Bracchi. Cuando Bracchi fallece, Miguel Angel le diseña el mausoleo en la iglesia de Santa Maria en Aracoeli, Roma. Encarga a su discípulo Urbino la realización del mismo. Cuando empezó a pintar la bóveda de la Capilla Sixtina tuvo una relación con Giovanni da Pistoia, joven y bello literato. En 1532, en Roma, conoce a quien sería el amor de su vida, Tommaso Cavalieri, de 17 años, de inteligencia poco común y amante de las artes. Miguel Angel contaba entonces con 57 años. La amistad, la pasión y la fidelidad para con él la mantuvo hasta su muerte. Tommaso lo asistió a la hora de su muerte.
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3 comentarios:
Una excelente reseña para un grande!
Me encanta la diferencia de edad con su amante, se estilaría en esa época?
BESOTES AMIGO!!
La reseña es muy corta para todo lo que Miguel Angel merece, pero mis posts siempre son cortos. Sobre lo del estilo en la época, parece que muy bien puede continuar hasta ahora. No crees?
Querido Peter, cómo estás??!!!
Desconocía esta parte de la vida íntima de Miguel Angel.
Admiro a los artistas porque soy una inútil en todo lo que sea creativo, para que te des una idea, las casitas que dibujo son el clásico triángulo adosado a un cuadrado, jajaaja!!!
Como tampoco se hacer ninguna figura con ningún tipo de masa.
En fin, supongo que por ello, me pierden las obras de los talentosos!!!
Te dejo un besote bien grandote!!
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