El clavadista venezolano, Robert Páez, compitió en las
olimpiadas del 2012 y 2016, y públicamente declaró su homosexualidad en la
revista OutSports.
“Creo que nací
homosexual. A medida que crecía era más conciente de ello, y al igual que
muchos, se convirtió en mi gran dilema. Fué una preocupación constante que me
interesara más el baile ó las modas, que en mi cultura están reservadas para
las mujeres ó gays. Me avergonzaba de hacer muchas cosas. Había momentos en que
avergonzaba de mis salidas públicas y enfrentar quién era”, dijo.
Páez cree que “Dios me ha creado así” y ha aprendido a aceptar su homosexualidad con “orgullo y coraje”.
“Entiendo que ésta
será mi verdad para siempre, y que mi auto-aceptación está en mis manos. Aunque
tenia la respuesta, me preocupaba cómo se sentiría mi familia, qué es lo que
dirían mis hermanos?, cómo reaccionarían mis amigos, ó la gente que me sigue
desde las tribunas?”.
Páez se lo dijo a su madre cuando tenia 18 años después de
representar a Venezuela en las Olimpiadas de Londres. “Ella supo aceptarme tal como soy, aunque lloró, y éso me hirió un
poquito, al final todo estuvo bien”. Sus hermanos y su padre también lo han
aceptado.
“Algunas veces como
hombres homosexuales, temiendo lo que realmente somos, buscamos una enamorada para
hacer creer a nuestras familias que somos ‘realmente hombres’. Quiero decir a
otros que no estamos engañando a nadie, sino más bien estamos defraudándonos a
nosotros mismos.
“Al compartir mi
historia, quiero ayudar a entender que la homosexualidad es una palabra tan
común como heterosexualidad. Tenemos que leerla, decirla y aceptarla con
claridad y madurez. Tenemos que entender que todos somos iguales”.
“El aceptarnos y
respetarnos a nosotros mismos son los primeros grandes pasos. La vida es
demasiado hermosa como para pasarla encerrado en el closet”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario