jueves, marzo 27, 2008

Retorno a lo Fundamental

"Un retorno a lo fundamental es esencial para la perpetuidad", lo escuché de labios de Harold Be. Lee hace algunos años atras y traté de entenderlo y aplicarlo desde entonces.

Entendía que lo básico no podía desligarse de nuestros seres si queríamos permanecer como entidades eternas, sea de manera individual ó colectiva. Lo básico y los principios deberían permanecer en el individuo (y por lo tanto en la sociedad) para poder seguir viviendo, evolucionando, avanzando. De otro modo, si desecharamos lo básico corriamos riesgos enormes de convertirnos en intrascendentes.

El principio básico de la frugalidad que por toda una generación (ó dos?) se ha dejado de vivir en los Estados Unidos de Norteamérica ha regresado por la puerta grande mas por imposición que por voluntad. Escuchaba la historia de alguien que veía a su abuelo, sobreviviente de la Segunda Guerra Mundial en Europa, guardar cortezas de pan en bolsas de plástico en el closet, para los "momentos de necesidad". Manía que podía lindar con la locura para aquellos que no vivimos el momento de hambre que muchos pasaron. Estamos acostumbrados a llenar restaurantes y pedir en exceso, para sólo tomar un par de bocados y el resto echarlo a la basura. Acostumbrados a salir de compras con cualquier excusa y tener la casa llena de ropa y otros articulos con la etiqueta puesta y de repente nunca usarse, acostumbrados a ser el pais donde se desperdicia mas.

La historia económica de las ultimas semanas, con la venta de las acciones del banco Bear a $2.00 cada una! Nos ha hecho revalorar la idea del "retorno a lo fundamental" a la simplicidad, a la economía, a la frugalidad. Febrero ha sido el mes de menos venta (probablemente Marzo no le lleve mucha diferencia), es fácil encontrar mesas en otrora restaurantes que no aceptaban reservaciones y tenían una hora de espera para acomodar clientes! Muchas cosas han cambiado, el aguila está herida y va perdiendo altura. Esperemos, con la fe cristiana que el pais se precia en tener, que se vuelva a remontar vuelo, por nuestro propio bienestar. Y que ésta lección, si la aprendemos bien, nos ayude a extender la mano a mas necesitados en el futuro.

1 comentario:

Manu dijo...

No creo que ningún tipo de fe frene lo que está pasando.
Y en cierta medida dentro de mi siento que será mejor así. El lujo, lo vanal, el desenfreno está inundando el mundo y es hora de que se le ponga freno. En verdad hemos de volver a unos principios fundamentales, como tu dices, y todos seríamos mucho más felices.
Un beso enorme