Elder Oaks,
del Quorum de los Doce Apóstoles de la iglesia mormona, dijo en la Conferencia
General el dia de ayer, que la oposición de la Iglesia de Jesucristo de los
Santos de los Ultimos Dias al matrimonio homosexual es un “decreto divino que se mantendrá para siempre”.
Esta postura
firme puede poner en problemas a los Santos de los Ultimos Dias con su familia
y amigos en los Estados Unidos y en el extranjero, dijo Oaks, y puede imponer
conflictos internos para los miembros.
“Debemos tartar de balancear las demandas de
seguir la ley del evangelio en nuestras vidas personales y enseñanzas”, dijo, “al mismo tiempo que buscamos el mostrar
nuestro amor por todos”.
¿Será ésta
una posición que se mantendrá inalterable? Oaks es uno de los apóstoles
sobrevivientes al grupo de Boyd K. Packer, conservador a ultranza y
abiertamente homofóbico. Anteriormente, el Segundo presidente de la iglesia,
Brigham Young, declaró: “¿Les debo decir la ley de Dios concerniente a la raza Africana?
Si el hombre blanco, quien pertenece a la semilla escogida, mezcla su sangre
con aquella de la semilla de Caín (la raza negra), la pena, bajo la ley de
Dios, es muerte en el acto. Siempre será así” (Journal of Discourses, Vol 10, Page 110)
También
dijo: “¿Por cuánto tiempo ésta raza soportará la tremenda maldición que está
sobre ellos? Esa maldición permanecerá sobre ellos, y nunca podrán poseer el
sacerdocio. (Journal of Discourses 7:290-291 – Octubre 9, 1859)
Sin embargo,
en la primavera de 1978, Spencer W. Kimball, décimo-segundo presidente de la
iglesia, declaró haber recibido una revelación de Dios para dar el sacerdocio a
los negros.